Recuerdo una escena de la película "Regreso Al Futuro", en la cual Michael J. Fox trasladado en el tiempo 30 años atrás, intenta despertar a su padre sin éxito. Al final consigue despertarle poniéndole en un walkman una cinta de Van Halen...su padre se despierta exaltado diciendo que vienen extraterrestres. Imaginaros el impacto de Eddie Van Halen tocando la guitarra a finales de los 70, puede que ahora estemos saturados de tremendos guitarristas tan técnicos, pero en aquellos años este disco dejó a todo el mundo con la boca abierta.
Y si Eddie Van Halen hacía la música, el cantante David Lee Roth directamente la vendía. Pocos cantantes tan faltos de técnica pueden meterse al público en el bolsillo en un abrir y cerrar de ojos. "Diamond" Dave es probablemente uno de las Rockstars definitivas, el hombre que sabe tocar la tecla correcta para que todo funcione, el tío de un carisma desbordante que te incita a vivir la vida y a saborear cada momento como si fuera el último momento, un auténtico showman. Un crack.
Y el debut de Van Halen es una auténtica fiesta de principio a fin. Temas como "I'm The One" o "Jamie's Cryin'" redifinieron el sonido del Hard Rock americano, "Ain't Talkin' Bout Love" es un clásico inmortal que debería despertar a cualquier muermo hasta hacerle enloquecer, "Feel Your Love Tonight" es la banda sonora para la perfecta fiesta playera, "Little Dreamer" es en mi opinión la pequeña joya oculta de este álbum y la ya legendaria versión de "You Really Got Me" es incendiaria.
Un pedazo de disco que ya lleva vendidas desde su edición 10 millones de cipias sólo en USA y que debería estar en toda colección de aquel que se precie de ser rockero. Si no tiene este disco, ni es rockero ni es nada, nada más que un charlatán.
"Jamie's Cryin'"