BIGELF: "Cheat The Gallows"

Muchas cosas se podrían discutir de Popular 1 a estas alturas, sobre todo viendo las ediciones de los últimos años. Que si ya no tiene el nivel que tuvo en los 90, que si la mayoría de sus redactores no dan la talla, que si el Correo no son más que alabanzas a César "The Man" Martín, o que César Martín definitivamente ya no es es mismo de hace 15 años y no se involucra como quisiéramos los demás.

Todo estas cosas no dejan de ser ciertas, pero aún así muchos seguimos comprando la revista mes a mes, visitamos el blog de César, y en definitiva tenemos una relación amor/odio que no podemos disimular. Pero al César lo que es del César, y nunca mejor dicho, este hombre y esta revista nos ha descubierto un buen puñado de bandas que no habríamos escuchado nada de ellas si no es por Popular 1. Y sí, es muy fácil descubrir ahora a bandas, con tanta información como obtenemos en Internet, pero hace 15 años no teníamos nada de eso. Sólo unas cuantas revistas, algún programa de radio interesante y mucha curiosidad. Y nos comprábamos los discos a ciegas, con tan sólo un par de referencias en alguna revista. Afghan Whigs, Redd Kross, Fun Lovin' Criminals, Nick Cave, Buckcherry, Screaming Trees, se me ocurren un buen montón de bandas que disfruto gracias a ellos. Y un nuevo ejemplo es el descubrimiento del año...Bigelf.

Con tan sólo ver el clip de "Evils Of Rock And Roll", tuve que escuchar su disco "Cheat The Gallows" para comprobar si todo era tan bueno como lo que acababa de ver y escuchar. Y sí, hay muchos más temas tan increíbles como ese y con un montón de matices, influencias, guiños, copias de bandas setenteras como Black Sabbath, Pink Floyd, Deep Purple, T.Rex, Doors, el Alice Cooper más cabaretero, Queen, Bowie...


De hecho, el primer tema contiene todas esas influencias comprimidas en una canción, hay elementos de todos ellos, por increíble que parezca. "Gravest Show On Earth" es un tema tan barroco, complicado y con tantos detalles que deja patente que cualquier banda no puede hacer esto. Y ellos lo hacen y muy bien. Les sigue un "Blackball", con un riff machacón apoyado con un teclado aplastante, un estribillo pop de lo más pegadizo y una increíble parte central a base de teclados y saxofon con una intensidad que provoca éxtasis. A estas alturas del cotarro no dejas de maravillarte con lo que estás escuchando y te preguntas si van a ser capaces de mantener el nivel. La floydiana y aunque algunos no lo crean lennykravitziana "Money, It's Pure Evil" tranquiliza un disco con un inicio tan arrollador, pero es que la calidad sigue ahí, intacta en lo más alto de tus propias exigencias. Aquí no hay cafres tocando el riff más infernal, aquí hay una una clase que tira de espaldas. El comienzo de "Evils Of Rock N' Roll" directamente es hipnótico, maravilloso a la vez que fantasmagórico y poderoso. Uno de los mejores temas que he escuchado en los últimos años. La vena Sabbath empieza a fluir y se apodera de todo en este tema. Ozzy e Iommi desearían tener este tema en su repertorio, con un cambio de ritmo directamente acojonante. Es desde ya un clásico.



Los dos siguientes temas son lo más Pink Floyd del disco, incluso recuerdan a Radiohead en según que pasajes. "No Parachute" confirma que Damon Fox ha realizado los mejores arreglos con su teclado que se han hecho en mucho tiempo, creando unas atmósferas de lo más inquietantes, al igual que en "The Game" que parece sacada directamente del "Dark Side Of The Moon". Algunos pensarán que prácticamente son una banda de tributo, y no voy a recurrir al mañido comentario de "añaden toques personales" a su música. Sí, suenan a todas esas maravillosas bandas 70's, pero es que lo hacen tan bien y son tan poca la gente que se puede permitir el lujo de hacerlo tan barroco, tan pretencioso y salir no sólo airosos de ello, sino victoriosos que te da igual. "Superstar" directamente resucita a un muerto, y concretamente a Marc Bolan. Esto es un hit. En mi mundo ideal esto reventaría las radios, las televisiones, la gente la bailaría en las bodas y chascarían los dedos mientras escuchan sus Ipod paseando por El Retiro. El inicio tranquilo de "Race With Time", es precisamente eso, el inicio de un in crescendo que tiene su clímax guitarrero y sorprendente justo después del estribillo. Directamente no te lo esperas, hasta te asustas. "Hydra" es un repaso a los inicios del Metal, por si alguno no le ha quedado claro quien comenzó todo esto hace 40 años. De un inicio de lo más Deep Purple, pasamos a una fase Sabbath con unos teclados enfermizos, de esos que te hacían chirriar los oídos en los primeros discos de Marilyn Manson. Gran tema. Y para terminar, tenemos el tema más progresivo y difícil del disco "Counting Sheep" el cual parece una ópera con muchísimo toque Queen.

En definitiva, gran descubrimiento y que además tienen más trabajos que no creo que estén a este nivel tan majestuoso, grande y excesivo que lucen en "Cheat The Gallows", pero que seguro que tienen álbumes que habrá que prestarles atención. Seguro.